Cuatro años más tarde, en Ámsterdam, el torneo olímpico de fútbol volvería a disputarse bajo las normas FIFA y Uruguay ratificó lo hecho en París y volvió a llegar a la final, donde enfrentó a Argentina. «Maracanazo» (en portugués: Maracanaço) es el nombre con el que se conoce a la victoria de la selección de fútbol de Uruguay en el último partido de la Copa Mundial de Fútbol de 1950, frente a la selección de fútbol de Brasil.